Es increíble como a la gente le encanta las manifestaciones sobrenaturales y el espectáculo. Por naturaleza nos enseñan que debemos ver en lo que creemos, y en los cursos de ciencias desde niños también nos enseñan física y química, por lo cual hay personas que no creen en Dios porque no es física ni química.
En 2 Reyes 5 hay un pasaje de mucha enseñanza que relata la sanación de Naamán. Este era un general del ejército de Siria, una persona muy valerosa pero leprosa. Los sirios no adoraban a Dios, ni creían en Dios, pero como una criada suya le dijo que si iba a Israel y buscaba al profeta el podría sanarle de su lepra. Cuando llegó el profeta Eliseo le mandó decir que fuera a bañarse siete veces al Jordán, y analicemos lo que respondió:
“Y Naamán se fue enojado, diciendo: He aquí yo decía para mí: Saldrá él luego, y estando en pie invocará el nombre de Jehová su Dios, y alzará su mano y tocará el lugar, y sanará la lepra. Abana y Farfar, ríos de Damasco, ¿no son mejores que todas las aguas de Israel? Si me lavare en ellos, ¿no seré también limpio? Y se volvió, y se fue enojado.” 2 Reyes 5:11-12
¿Qué esperaba Naamán? UNA SEÑAL. UN ESPECTÁCULO. ALGO SOBRENATURAL A LA VISTA.
QUÉ DIJO JESÚS A LOS QUE QUERÍAN VER SEÑALES
Cuando el Señor Jesucristo predicaba también los judíos esperaban señales y espectáculo. A los que esperaban señales el Señor fue tajante en varias ocasiones:
“El respondió y les dijo: La generación mala y adúltera demanda señal; pero señal no le será dada, sino la señal del profeta Jonás.” Mateo 12:39 y se repite en Mateo 16:4.
Y durante su pasión, cuando fue enviado a Herodes, éste deseaba ver un milagro o señal de él:
“Herodes, viendo a Jesús, se alegró mucho, porque hacía tiempo que deseaba verle; porque había oído muchas cosas acerca de él, y esperaba verle hacer alguna señal.” Lucas 23:8
En todos esos pasajes se aprecia que los que desean ver señal, ésta no les es dada. Y todo parece indicar que si se les hubiera dado señal de nada hubiera servido.
También el Señor Jesucristo nos refirió la historia del rico y Lázaro. En aquella historia, el rico una vez que fue al Hades y estaba atormentado en aquella llama, hablaba con Abraham para que mandase a Lázaro y les mostrase como señal que el cielo y el infierno existen, y que si alguien como Lázaro resucitase de los muertos y les testificaba, ellos se convertirían de su mal camino, pero Abraham les dijo que si no leen la Biblia, tampoco se persuadirían si alguien se levantara de los muertos:
“Él entonces dijo: No, padre Abraham; pero si alguno fuere a ellos de entre los muertos, se arrepentirán. Mas Abraham le dijo: Si no oyen a Moisés y a los profetas, tampoco se persuadirán aunque alguno se levantare de los muertos.” Lucas 16:30-31
LAS SEÑALES EN ESTOS TIEMPOS
En la Palabra se nos enseña una y otra vez que habrá por el mundo falsos espíritus y falsos maestros que harán señales y prodigios:
“Examinadlo todo; retened lo bueno”. 1 Tesalonicenses 5:21
“Amados, no creáis a todo espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios; porque muchos falsos profetas han salido por el mundo. En esto conoced el Espíritu de Dios: Todo espíritu que confiesa que Jesucristo ha venido en carne, es de Dios; y todo espíritu que no confiesa que Jesucristo ha venido en carne, no es de Dios; y este es el espíritu del anticristo, el cual vosotros habéis oído que viene, y que ahora ya está en el mundo”. 1 Juan 4:1-3
Y el mismo Señor Jesucristo nos alertó:
“Porque se levantarán falsos Cristos, y falsos profetas, y harán grandes señales y prodigios, de tal manera que engañarán, si fuere posible, aun a los escogidos”. Mateo 24:24
Hoy día estas manifestaciones son muy comunes. Por doquiera escuchamos hablar de personas las cuales se atribuyen ser profetas, apóstoles o enviados de Dios. La prueba de su verdad es si están guardando la ley de Dios y están cimentados en la Palabra de Dios.
Otros imponen manos y derrumban con su supuesto poder, otros proclaman la risa santa, bailes santos y otras manifestaciones que no solo NO SON BÍBLICAS, sino que tratan de hacer un espectáculo de ellos para atraer a las personas que no conocen la Palabra de Dios. No es suficiente con hacer milagros o señales. Estos no son evidencia contundente de que se posee el Espíritu de Dios, como lo demuestran las Escrituras, porque siempre ha habido magos, ilusionistas y personas que han sido capaz de hacer señales. Estos seguirán existiendo en el futuro:
“Y vi salir de la boca del dragón, y de la boca de la bestia, y de la boca del falso profeta, tres espíritus inmundos a manera de ranas”. Apocalipsis 16:13
Paradójicamente, así como la rana atrapa a una mosca con la lengua, estos falsos profetas o líderes tratarán por medio de la persuasión y de su espectáculo, atrapar a muchos en sus redes del engaño.
Por eso, el Señor nos dijo que no todo aquel que le proclama entrará en el reino de los cielos.
“No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos. Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad”. Mateo 7:21-23
EL NEGOCIO DETRÁS DE ESTOS FALSOS PROFETAS
El Apóstol Pablo nos define también como son estas personas y como se disfrazan:
“Porque éstos son falsos apóstoles, obreros fraudulentos, que se disfrazan como apóstoles de Cristo. Y no es maravilla, porque el mismo Satanás se disfraza como ángel de luz”. 2 Corintios 11:13-14
El término “ángel de luz” nos indica que van a parecer personas santas, honrosas, seguidores de la verdad, pero en realidad van a ser personas guiadas por satanás. Normalmente estas personas y sus organizaciones lo que persiguen es el lucro económico, y ahí les dejo una reflexión final:
¿En qué parte de la Biblia Jesús, algún apóstol o profeta pidió dinero o aceptó algún presente por hacer alguna sanación, milagro o prédica? Más bien siempre los rechazaron. Volviendo al caso del profeta Eliseo y Naamán, este le quiso dar un presente por su sanación y Eliseo lo rechazó contundentemente:
“Y volvió al varón de Dios, él y toda su compañía, y se puso delante de él, y dijo: He aquí ahora conozco que no hay Dios en toda la tierra, sino en Israel. Te ruego que recibas algún presente de tu siervo. Mas él dijo: Vive Jehová, en cuya presencia estoy, que no lo aceptaré. Y le instaba que aceptara alguna cosa, pero él no quiso” 1 Reyes 5:15-16
En ningún pasaje del nuevo testamento hay un solo caso de Jesús o los apóstoles pidieran o aceptaran presentes por sus sanaciones, milagros, resucitaciones, etc. Repito, ni un solo caso. Entonces, tenemos una señal clara de que si alguien pide dinero no es conforme a las escrituras y debemos salir huyendo. La otra señal es que van a predicar un evangelio conforme a lo que la gente desea escuchar, no buscando la santidad, sino adecuando o justificando la carnalidad con la Palabra que es justo lo que muchas personas quieren escuchar:
“Y muchos seguirán sus disoluciones, por causa de los cuales el camino de la verdad será blasfemado, y por avaricia harán mercadería de vosotros con palabras fingidas. Sobre los tales ya de largo tiempo la condenación no se tarda, y su perdición no se duerme.” 2 Pedro 2:2-3
“Porque algunos hombres han entrado encubiertamente, los que desde antes habían sido destinados para esta condenación, hombres impíos, que convierten en libertinaje la gracia de nuestro Dios, y niegan a Dios el único soberano, y a nuestro Señor Jesucristo.” Judas v.4
CONCLUSIÓN
Estimado lector. Busca una Iglesia no por que hagan señales, no porque tenga muchos miembros, no porque haya una buena orquesta. Busca una Iglesia donde se ciñan a las Sagradas Escrituras y donde lo que prime es el amor. Encomiéndate a Dios, y el Espíritu Santo te guiará.